Soy

Llevo en mis huesos tus recuerdos y aún debo ser soporte de las ilusiones de otros. Me has lavado la cara, regalado los oídos y reforzado los puntos débiles. Tanto, que he llegado a convencerme de ser un viejo útil, un amasijo de virtudes incorruptibles. Noble y duradero, estoy listo para el próximo proyecto. Soy… de segunda mano.